Tonypotosino
Nuestros cuerpos, cementerios de animales
Después de muchos años de ignorar los pormenores de esa llamada fiesta brava, empecé a reflexionar sobre la crueldad que significa esta actitud bárbara de las corridas de toros. Tanto así que se me ocurrió una definición para el protagonista del triste espectáculo que precisamente no es el cornúpeta. Torero: Versión humana de demonio personificado, aparentemente, sin cuernos. Con caminar de travesti, un artista con el valor disimulado en testículos abultados. El mensaje es claro, no a las corridas de toros, no al consumo de nuestros hermanos animales, decía una digna amiga de México, basta de convertir nuestros cuerpos en cementerio de especies enteras de la fauna. Lo del sacrificio al rito en las misas tiene su origen en la abolida matanza de corderos para levantar altares a un Dios que no es precisamente Creador de muerte sino vida…