Vitin68
Quizá esta analogía solo destaca la sensación de intimidación.
Sabemos que el Sol es pura energía, por tanto intimidante, por sus efectos UV sobretodo. En la misma línea reflexiva pero más figuradamente, hallamos que la concepción de la muerte y saber que les llegará indistintamente a todos (por el momento), produce generalmente una sensación amenazante, tanto que hasta es un tema que solemos evadir. No obtante, aunque no debieramos dedicarnos a ver desafiante y contraproducentemente al Sol “a los ojos”, en el caso de la muerte, equilibradamente, SÍ deberíamos "mirarla", sobretodo si comprendemos que solo es un descanso (Ecles. 9:5, 10, 11) Sabio es preocuparnos de cuanto sabemos de ella y cuan preparados espiritualmente y en paz estamos como para enfrentarla en cualquier momento, a lo más con el temor a COMO será, es decir; que ojalá sea instantánea, sin sufrimientos. Después, la muerte es lo de menos, cuando esta llega. -V. H.